lunes, 19 de abril de 2010

Alicia a través del espejo



Al mundo del espejo Alicia le decía...

Al mundo del espejo Alicia le decía:
¡En la mano llevo el cetro y sobre la cabeza la corona!
¡Vengan a mí las criaturas del espejo, sean ellas las que fueren!
¡Vengan y coman todas conmigo, con la Reina roja y la Reina blanca!

Y cientos de voces se unieron entonces coreando:

¡llenad las copas hasta rebosar!
¡Adornad las mesas de botones y salvado!
¡Poned, gatos en el café y ratones en el té!
¡Y libemos por la Reina Alicia, no menos de treinta veces tres!

Siguió luego un confuso barullo de «vivas» y de brindis y Alicia pensó: - Treinta veces tres son noventa, ¿me pregunto si alguien estará contando? -Al minuto siguiente volvió a reinar el mayor silencio y la misma estridente voz de antes empezó a cantar una estrofa más:

¡Oh criaturas del espejo, clamó Alicia. Venid y acercaros a mí!
¡Os honro con mi presencia y os regalo con mi voz!
¡Qué alto privilegio os concedo de cenar y merendar conmigo,
con la Reina roja y con la Reina blanca!

Otra vez corearon las voces:

¡llenemos las copas hasta rebosar, con melazas y con tintas,
o con cualquier otro brebaje igualmente agradable de beber!
¡Mezclad la arena con la sidra y la lana con el vino!
iY brindemos por la Reina Alicia no menos de noventa veces nueve!

Lewis Carroll