miércoles, 28 de abril de 2010

"Camas" (fragmento)




"Siempre he lamentado que mi educación terminase en la quinta elemental. Resulta endiabladamente difícil introducirse en el gran mundo y crearse una imagen de sofisticación.
La anfitriona podría sorprenderme con teorías de Schopenhauer o Kafka. ¿Y que podría aportar yo? La tabla de multiplicar hasta el siete.
En defensa propia me convertí en un lector voraz. Acompañaba a mis amigos con un libro y, si la conversación se ponía intelectual, enterraba la nariz en las páginas y subrayaba cada frase con un gruñido de impaciencia.
Pronto adquirí fama de empollón. Y eso que nunca he tenido plumas. Y siempre he detestado el pollo.
Tras leer a Stephen Leacock, O. Henry y otros de su pinta decidí que podía hacer lo mismo. Y me hice escritor. Me cosí parches de cuero en el codo de todas las americanas, cambié los cigarros por una pipa y empecé a decorar mis frases con palabras como "cacofónico" y "consanguinidad". "

Rapto de Proserpina, de Bernini (1621)



Estoy vivo y toco
Toco, toco, toco.
Y no, no estoy loco.

Hombre, toca, toca
lo que te provoca:
seno, pluma, roca,

pues mañana es cierto
que ya estarás muerto,
tieso, hinchado, yerto.

Toca, toca, toca,
¡qué alegría loca!
Toca. Toca. Toca.

Damaso Alonso