domingo, 6 de junio de 2010

Peter Orlovsky




(...) Lo que Ginsberg llamó su “matrimonio” duró desde 1954 hasta el mismo día de su muerte en brazos de su amado. Y el poeta trató de explicarlo más de una vez (más tradicional en esto que en los cánticos “beats”, pero el secreto estaba en combinar ambas cosas) declarando que la fórmula de su larga relación con Orlovsky no estaba en el sexo –que existía cuando tenía que existir- sino en el compañerismo y en el afecto mutuos. Ginsberg necesitaba a Orlovsky y este (aunque tuvo otras relaciones y varias femeninas) nunca le abandonó. Allen llegó a declarar “no quisiera irme al cielo dejando a Peter en la tierra solo, porque él nunca me dejó solo si estaba enfermo en cama, si me moría, si envejecía o si tenía un calentón o simplemente reuma…” (...)

http://www.dosmanzanas.com/2009/12/allen-ginsberg-y-peter-orlovsky-continuidad-en-la-turbamulta.html